Posibilidades

En la anatomía del silencio
Al ser el viento un acertijo
Soltando su ingravidez de madre en parto
Que escarba la pura inconciencia
Alada de la noche.

En su cristal de negra nitidez
Con su juramento verraco
De nunca mostrar su rostro
A los astros

Noche… qué híbrida es tu oscilación
Tu cabeceo tu destino
Y tu mudez de natalidad relativa
Sin tu beso!!

Noche
Un rayo en mil pedazos dando tumbos
Torciendo a lo posición de lo antiguo
Estrujando a las heridas plantas
Que no pueden gozar de ti
Pero lo tienen algo de sabido...
De la perdición ocurrida en tu éxtasis.

Noche así eres
Un nervio que escultora
La probabilidad de no ser yo en tu nada…
Donde el pensamiento es lo único
Preparando para un ataque.

Tú eres la reina
Porque ahora eres la mía
Y todo lo que está en tu cuerpo
Es lo vasallo... a la furia
De tu hermosa ceguera

Nadie puede atrincherar de tu áurea
Nadie puede escapar de tu destino

Y de pronto tu astrolabio estalla
Abres al cielo
Y en gotas cae el espacio sideral de tu silencio
Como incandescente plomo
De meteórica asma.

Serás así me dirían los adentros
Pues partirás a estas...
Las entrañas de la tierra.

Serán así me dirían los adentros
Surgirás nuevamente
En un hongo de lava
Y en una raza pálida de mármol.

Noche
Las gigantes ventanas del infierno
Que estaban cerradas
Partirán en tu mitad grotesca
El mundo derrumba...
Ya no hay sobras para la montaña.

A borbotones levanta
Como un brazo
La polvareda y su blanca sangre
A borbotones
Sin latitud sin altura
Parece que algo se escucha.

Sólo una voz...
Más bien vocifero
Más bien lastimero aullido que cubre al horizonte
De todos los dolores de tus cenizas.

A borbotones
Ruedan vomitando eternidad
Los instrumentos que jugaron
Durante el día con nuestros sueños
Y ahora transfiguran... para una apocalípsis.

A borbotones
Lanzados hacia el cielo
Cíclopes que ansían recuperar
Los ojos vaciados de su muerte

Sembrados entre esquinas
Calles y escombros de los edificios.

Nos declararon la guerra.